Cualquier persona que tenga pensado emprender debe considerar lo siguiente: no tener competidores es el mejor modo de que un inversionista en potencia deje de serlo y deje de lado cualquier idea de negocios. Numerosos emprendedores cometen la equivocación de creer que su servicio o producto no tiene competidores, siendo que todos los servicios y productos los tienen y también sustitutos.
Cierta anécdota relata que los astronautas de la NASA se quejaban de que los bolígrafos eran inservibles en el espacio. Las plumas que usamos cotidianamente para escribir funcionan con gravedad, pero en el espacio, al carecer de ella, los bolígrafos no son aprovechables para documentar nada. De manera que los científicos de la NASA decidieron afrontar esta dificultad invirtiendo más de un millón de dólares para crear una pluma espacial capaz de funcionar en ambientes de cero gravedad.
Tiempo después cuando cayó el socialismo y finalizó la Guerra Fría, Roscosmos la agencia espacial rusa invitó a la NASA a un cónclave para compartir sus conocimientos. De entre sus muchos adelantos, los científicos de la NASA llevaron consigo la famosa pluma espacial.
Sin embargo los rusos no mostraron ningún interés en ella. Los estadounidenses asombrados les preguntaron que cómo era posible que no les interesara este recurso para poder escribir en un entorno de cero gravedad. Los científicos de Rusia les contestaron que la primera ocasión que un cosmonauta de aquella nación se había quejado de que no podía escribir con su bolígrafo en el espacio solucionaron el problema… dándole un lápiz.
De modo que una moraleja valiosa para los emprendedores es que por muy innovador que resulte un producto siempre habrá por lo menos un sustituto y conviene tenerlo siempre presente.