Consejos para estudiar menos pero aprender más

Es importante diferenciar entre aprender y memorizar y también distinguir entre estudiar y estas dos actividades mencionadas. Comúnmente el estudio es pensado como una dinámica que implica memorizar extensos párrafos de texto. En lo que sigue mencionaremos algunos tips para estudiar mejor, haciéndolo durante menos tiempo pero aprendiendo más.

Estudiar en tiempos de 25 minutos

Mucha gente piensa que estudiar bien es hacerlo durante horas y horas. No obstante, estudios científicos han demostrado que la facultad de concentración disminuye notablemente luego de 25 minutos y que el modo más eficaz de aprender es dividiendo el tiempo disponible para esta tarea en lapsos de tal duración. Numerosos expertos afirman que quienes aprenden más rápido son aquellas acostumbradas a mantener su concentración durante breves intervalos de tiempo.

Técnicas de vanguardia para leer

Una de las actividades clave para el proceso de aprendizaje es comprender, clasificar y distinguir lo que se está leyendo. El scanning y el skimming son dos técnicas de lectura que nos permiten captar grandes porciones de texto y entender su sentido sin tener que avanzar línea por línea. El skimming consiste en pasar la vista por un texto captando palabras clave. Por lo general la primera línea de un párrafo.

El scanning es una técnica parecida que consiste en leer en un texto ciertas palabras clave para tener un panorama aproximado de lo que trata. En este caso conviene ejercitarse identificando las tres palabras clave más importante de un texto e ir subrayando lo más relevante.

Explicar lo que se ha estudiado

Se sabe a nivel científico que el cerebro es capaz de entender y aprender conceptos cabalmente cuando puede comprender su esencia y explicarla. Un ejercicio interesante para estudiar menos pero aprender más es simular que se dan clases acerca de los temas que se han estudiado. Para eso hay que recopilar todo el contenido en notas breves, ponerse de pie y dar una clase a un público imaginario durante diez minutos. Es una estrategia efectiva para reforzar los conocimientos de lo que sí se sabe y detectar qué conceptos no se terminan por tener bien aprendidos.